Seguir con las mismas recetas económicas de hace 30 y más años y la apertura al extractivismo en minería y petróleo se lo puede analizar como partes de un todo de la política del Gobierno al cumplir sus primeros 100 días, apuntó Alberto Acosta, ex Presidente de la Asamblea Nacional Constituyente.
Cómo es eso de más Ecuador en el mundo y más mundo en Ecuador si nosotros somos solo de productos primarios. No existe claridad en el cómo. Además, los tratados de libre comercio no son de comercio y no son libres, dijo Acosta, al relievar nuestra “senda del subdesarrollo” y como política oficial el retorno al CIADI, “abiertamente inconstitucional”.
Al abordar el tema concreto de la dolarización, Alberto apuntó que incluso está por demás la propagandizada Ley para blindar la Dolarización por la sencilla razón que este esquema se mantiene siempre y cuando haya dólares y no por efectos de una Ley; ley que además favorece los intereses de la banca privada.
En los polémicos temas del extractivismo, el analista señaló que la ampliación en la frontera petrolera y la explotación minera sería comprometer negativamente el futuro de los hijos y nietos de esta región de la Patria. duplicar la tasa de producción que el mismo Lasso lo ha reconocido como imposible no puede darse de una manera responsable si al mismo tiempo no presenta un incremento de las reservas petroleras.

Lasso se encuentra ahora mismo en el dilema de cómo aplicar su fórmula de gobierno, continuó el analista, si por la vía del shock o por la vía gradual. La vía del shock la calificó como talibanes económicos.
Hay pocas reservas de petróleo, Lasso ha dicho que hasta fin de año habrá una producción superior a la anterior en un 8%. Hay pocas reservas petroleras y, por ejemplo, el bloque 28 que se propondrá explotar afectará al pueblo de Pastaza en sus fuentes de agua en la mayoría de cantones de la provincia. El petróleo es escaso y de baja calidad. En el nor-oriente se perjudicará a los pueblos en aislamiento voluntario.
Habrá que procurar enfrentar la política minera de Lasso con sus propios ofrecimientos y la consulta popular prometida para no afectar a las cuencas donde hay agua. Las promesas de recursos con la explotación minera también son una entelequia.