Las palabras de la asambleísta por Pachakutik, Rosa Cerda, en las que, dirigiéndose a un grupo de simpatizantes de su partido en la provincia de Napo, les instruyó para que “roben bien” y que “justifiquen bien y no se dejen ver las cosas” constituyen un hecho vergonzoso.
La Asamblea Nacional suele ser una de las instituciones peor valoradas por los ciudadanos en los últimos años. La desafección popular a la Asamblea Nacional tiene explicaciones que van desde la corrupción de algunos de sus integrantes hasta la sensación generalizada de que se dedican a perder el tiempo en la aprobación de resoluciones y exhortos, en lugar de aprobar las leyes que el país necesita para su desarrollo.
La empresa Click Report acaba de publicar una encuesta realizada durante el mes de julio de 2021en la que la Asamblea Nacional ocupa uno de los últimos lugares en confianza ciudadana, únicamente por encima del Consejo Nacional Electoral y de la Contraloría General del Estado, cuyos dos últimos titulares tienen órdenes de prisión. Es decir, apenas transcurridos dos meses desde la conformación de la Asamblea, ya existe una desconfianza generalizada de parte de la ciudadanía hacia dicha institución. (Editorial completo en www.4pelagatos.com)
Ricardo Flores, autor de este editorial