Desde antes del COVID-19 vivimos la pandemia neoliberal, afirma ex Presidente dela Asamblea Nacional
Tanto el gobierno de Rafael Correa como el de Moreno en el discurso dicen servir al pueblo, o que es un gobierno de todos, pero en la práctica sus medidas económicas son en beneficio de un grupo reducido de sectores como la banca, expuso en Nina Radio el ec. Alberto Acosta, al analizar las medidas económicas dictadas por el gobierno. La banca en la década anterior tuvo utilidades de alrededor de $ 2820 millones; y en el actual, sus utilidades bordean los $ 1700 millones de dólares. Inclusive, ahora, en estos dos meses de pandemia, la banca sigue reportando grandes utilidades, anotó el analista.
Acosta señala que al pueblo se le ajusta con medidas económicas de tinte neoliberal, (que le da continuidad al Gobierno de Rafael Correa), es decir, en plena pandemia nos aplican la flexibilización y precarización laborar con la reducción de la jornada de trabajo en 2 horas a los servidores públicos y una hora a los maestros; reducción laboral que significa disminución del salario.
El gobierno ha dado gusto total a los llamados sectores productivos y las Cámaras con el cambio a la relación laboral, que ahora se lo realiza a través “negociaciones entre trabajadores y empleadores”, lo cual implica nuevas normas en lo laboral, siempre en beneficio de los empresarios. De esta forma, se da viabilidad para que la jornada de trabajo se reduzca hasta el 50%, acotó Acosta.
Todo el peso de la crisis cae sobre los trabajadores y servidores públicos, reflexiona Acosta, al tiempo de criticar por la falta de creatividad del régimen para que las medidas sean también solidarias y que quien más gane, más aporte. Los sectores poderosos consolidan su poder con las medidas del régimen y concentran la economía del país en pocas manos.
La reducción del 16% de los salarios del sector público significa también una contracción de la demanda, lo cual implica menos movimiento de la economía y las ventas lo cual puede provocar mayor desempleo aun.
El pueblo se ha movilizado pese a los riesgos en su salud, prosiguió Alberto Acosta, esta respuesta ciudadana puede volverse en la repetición de un octubre que no quiere agotarse.
Lo que estamos viviendo en términos de la economía, es una pandemia neoliberal, que tiene dos corrientes nefastas: la flexibilización laboral y la flexibilización ambiental para el gran proyecto de los capitales del mundo la Mega Minería, añade Acosta.