Primero hay que reparar el oleoducto, las comunidades afectadas, no cuentan…
Este 29 de abril la FECUNAE con el apoyo de la CONFENIAE, presentó un recurso de protección en contra del Estado, en la búsqueda de reparación de derechos afectados de cientos de comuneros de Orellana y Sucumbíos, por la rotura del SOTE el 7 de abril, señaló Andrés Tapia Dirigente de comunicación de la CONFENIAE.
Aquel día, los dos oleoductos zozobraron ante un gran derrumbe en el sector de San Rafael, justo donde hace unas semanas atrás “desapareció” la cascada que llevaba ese nombre y que era uno de los paisajes más exóticos del Ecuador.
Andrés Tapia considera que este derrame es tan grande como el provocado por la TEXACO durante los años que operó en la explotación de crudo en la Amazonía. De acuerdo a versiones del propio Estado, se habrían regado 15.000 barriles de petróleo en ríos de Orellana y Sucumbíos, situación que ha afectado grandemente a la provisión de agua de los comuneros, la pesca y al medioambiente. Las comunidades afectadas directamente por el derrame son 42 de Orellana, se ha afectado también la provisión de agua a cerca de 120.000 personas de Orellana y Sucumbíos, dentro de ellas a 27.000 indígenas de 22 parroquias de las 2 provincia Amazónicas.