Las decisiones técnicas se someten a las políticas y es ahí cuando se distorsiona todo, opinó en Nina Radio el Ing. Luis Ordóñez, especialista en temas eléctricos.
Lo técnico en el caso Coca Codo Sinclair ha quedado en segundo plano por someterse a decisiones políticas, prosiguió al afirmar, tajantemente, que como técnico si se le pregunta pues que jamás recibiría la obra.
Otro problema, dejando en claro que la erosión regresiva no es por la central hidroeléctrica, Luis Ordoñez reconoce que el proyecto inicial de construcción de la central no fue para generar 1500 megavatios hora sino de 1200 en dos plantas. Aquí no hubo estudios, primero lo ponen en el plan maestro sin estudios y después los piden. Ahí es que pasaron por alto lo de la erosión regresiva, puntualizó el técnico.
Como técnico dijo Ordoñez, “Yo no recibo la obra”. Hoy mismo la central tiene 3 problemas, “desde abajo”, la erosión regresiva, desde arriba la sedimentación y en la plena central, más de 17 mil fisuras y que cada vez son más, muchas de ellas irreparables.
Fue por presión del tiempo, (presión política), que los estudios se hicieron después de ponerlo en el plan maestro.
De las fisuras ya conocía los técnicos desde 2021, afirmaron días pasados los técnicos de CELEC y, oficialmente, el problema estalla allá por 2015. Ahora, de 2017 hasta la fecha, se han más que duplicado el número de fisuras, es decir, ya están en las 17.499, según el informe de la comisión de fiscalización en base a información de CELEC.
Los acuerdos políticos están por encima de los intereses del país, continuó Luis Ordóñez; en este caso, se cruza por ejemplo la negociación de la deuda con China y es ahí entonces, donde confluyen los social cristianos, los correístas y también los del gobierno actual.
