El relato que hizo Yomaira Villafuerte, intendente de Policía de Pastaza, evidencia lo difícil del control de actos irregulares y abusos ciudadanos, productos de la farra y el abuso del licor.
Yomaira dijo que un ciudadano con claros síntomas de haber ingerido alcohol, pretendió huir y fue cuando el policía se adhirió al volante, fue arrastrado por unos 100 metros y entonces, el policía reaccionó y obligó al conductor a parar el vehículo.
Se reunió la muchedumbre, ávida de espectáculo que atizaba en contra de la policía hasta el momento, por acción del conglomerado humano, el chofer pudo irse como “que no ha pasado nada”.
En Nina Radio, en ilación del relato de la Intendenta, se recordó que la policía está por seguir, (si no lo está haciendo ya), una acción en contra de un ciudadano de apellido Yépez por haber fustigado y golpeado, (se dice), a un extranjero que estaba robando.
En Ecuador, no es posible hacer justicia por mano propia y por eso, el jefe policial del distrito seguirá una acción legal a los agresores.
Se judicializa a un ciudadano por ejercer “justicia de mano propia”, (nosotros no discutimos la pertinencia o no); pero, si se quisiera saber si la policía estará investigando para judicializar también al ciudadano que condujo el vehículo arrastrando a un policía.
La policía está en la obligación de investigar este caso. De acuerdo con la versión de la Yomaira, el padre del conductor ebrio, también es policía…
Aparte, la intendenta Villafuerte nos cuenta las acciones de su dependencia para el control del orden público y los operativos que realizan especialmente los fines de semana.
