Con estas fotografías y este texto, el porta”La Historia”, parte integrante del gran colectivo periodismo de investigación, reveló que también el Asambleísta Raúl Tello, de Pastaza, ha sido parte de “El Gran Reparto”, reportaje revelado hace algunas semanas y que la fiscalía ha ido investigando hasta concluir quienes han sido los asambleístas que recibieron dinero a cambio de modificar su conducta parlamentaria.
El caso es que el Asambleísta Raúl Tello, de la provincia de Pastaza, siempre ha negado su participación e incluso a retado a los periodistas, (como pudiera estar en ellos), que lo sometan al detector de mentiras, haciendo que el caso se parezca, al menos en las analogías, a lo dicho por el fundador del Movimiento Fuerza Compromiso Social, Iván Espinel, cuando candidato a la Presidencia de la República dijo que el planteaba que a los corruptos, por Ley, se les corte las muñecas. Pocas semanas después fue encontrado culpable de desfalco al IESS y tiene una sentencia de 10 años. Si a Iván Espinel se le aplicaba su propia Ley, estaría manco en la cárcel.
Iván Espinel, claro, sigue diciendo que es inocente y lo hecho con él es persecución política, lo mismo que ahora dirá Raúl Tello, quien ofreció someterse a un detector de mentiras para demostrar su inocencia. Ahora, uno de los hombres cercanos a Daniel Mendoza, su operador, Franklin Calderón ha dicho “como se dio #ElGranReparto: «Entregué USD 360.000 a cuatro asambleístas: Raúl Tello, Washington Paredes, María Mercedes Cuesta y Franco Romero. Y USD 320.000 para Eliseo Azuero». Dice que tiene respaldos. #Corrupción”.
Otro hecho muy singular que se hadado en la Asamblea, para incrementar su gran desprestigio es que el legislador Franco Romero, ahora también mencionado en la delación ante la Fiscalía, ha logrado escabullirse como asambleísta y es parte de la Comisión de Fiscalización. Franco Romero, Eliseo Azuero y Raúl Tello, desde el inicio de su gestión hicieron “gallada” al interior de la Asamblea Nacional.
Eliseo Azuero, al día siguiente de ser elegido asambleísta se desafilió del partido que lo llevó a la Asamblea, la ID, y pasó a ser independiente, el tenía ya la experiencia de haber sido asambleísta y conocer cómo funciona este organismo del Estado. No tardó en hacer “bloque con Raúl Tello, de Pastaza, quien también poseía “experiencia”. Los dos encontraron a Franco Romero y desde ese entonces, siempre actuaron con las mismas tácticas aprendidas de su gestión como diputados y con la confianza de haberse conocido con antelación.
Ellos se guardaban las espaldas, se confiaban los secretos y actuaban juntos para atraer a otros asambleístas y conformar grupos parlamentarios de chantaje, amenazas de juicios políticos y presionar por cargos públicos en sus respectivas provincias. (información en desarrollo)
Raúl Tello siempre fue miembro del BADI, desde su fundación hasta su desaparición. No ha sido solo el cheque por 40 mil que denunciaron en primera instancia. En esta información dice que recibieron otros 90 mil dólares…
